miércoles, 21 de agosto de 2013

Bucle sin fin ...

Varias cosas pueden ayudarte a dejar de pensar
en tu ex.
Una de ellas es dejar de albergar resentimientos
que te mantengan atada emocionalmente a él.
Aquello que odiamos no dejará de perseguirnos
hasta que logremos amarlo , y apreciemos el regalo
que esconde en su interior.
Agradécele sus humillaciones porque, ¿no es cierto
que, gracias a ellas, te has vuelto más fuerte ?
Y agradécele sus engaños porque sin ellos, ahora no
apreciarías tanto el valor de la honestidad.
Por otro lado, si fantaseas continuamente sobre el
hecho de volver con él, y crees que no podrías vivir
sin su amor, date cuenta de una cosa:
Cuando alguien nos ama, nos sentimos muy bien. Y
cuando esa persona deja de amarnos, solemos
sentirnos mal, porque ahora ya no recibimos ese
constante flujo de aprecio hacia nosotros.
Pero no te olvides de que tu felicidad no provenía
de que ÉL te viera con amor, sino de que su actitud
respecto a ti, hizo que TÚ te vieras con amor.
Y ESO era lo que te hacía explotar de alegría: el
reconocimiento del AMOR que ERES , y el recuerdo
de tu verdadera esencia.
Por otro lado, sé que cuando se ha compartido
tanto con alguien es difícil dejar de pensar en
todos esos momentos tan especiales. Y quizá en
algún rincón de nuestro corazón, aún albergamos la
esperanza de una posible reconciliación.
Así que, si no puedes dejar de pensar en tu ex,
recapacita sobre lo siguiente:
¿Has probado a dejar de escuchar a todas horas
"vuestra" canción? Si no te encuentras con fuerza
para hacerlo por ti, hazlo al menos por el resto de
tu familia, y por la tortura que supone para ellos
oír la banda sonora de Ghost ¡27 veces al día!
¿Has probado a dejar de releer sus cartas de amor
una y otra vez? Entre tus lágrimas y el sudor de
las manos, la tinta se está corriendo por los papeles
y lo está dejando todo hecho un asquito.
¿Has probado a dejar de preguntarle cada día a los
amigos de tu ex, si se sigue acordando de ti? A los
pobres los tienes tan agobiados, que hasta tienen
pesadillas por las noches.
Reconoce de una vez por todas que lo vuestro ha
terminado. Y date cuenta de que mientras no le
concedas la libertad a él, y te la concedas también
a ti, estarás atorada en un bucle sin fin: no podrás
conocer a otros chicos, porque tu atención estará
fijada en él, y al creer que lo vuestro no se ha
acabado realmente, tampoco sentirás la necesidad
de comenzar una nueva relación con alguien.
Y no creas que para dejar marchar su recuerdo,
necesitas odiarlo a él para poder desembarazarte
así de su memoria. Actuar de ese modo, lo anclará
aún más en ti, porque no hay nada tan pegajoso
como el resentimiento: no te lo podrás quitar de
encima ni con aguarrás.
En vez de eso, valora todo lo que recibistes de él
(insultos incluidos), porque sin ellos no te habrías
dado cuenta de que lo vuestro no podía seguir así.
Y cuando sientas verdadera gratitud por todo lo
que aprendiste a su lado, te sentirás libre para
soltar su recuerdo y proseguir tu camino, sin el
lastre de la pesada carga emocional que arrastras
ahora.

#autoayuda

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